Los labios son los elementos que sin duda alguna aportan
sensualidad a nuestra boca, por lo que es fundamental que los cuidemos y
protejamos.
Tres pasos para tener nuestros labios sanos y bonitos:
- Hidratación.
- Protección.
- Exfoliación.
Un error muy frecuente en el que caemos muchas es humedecer
los labios con saliva cuando los notamos secos, sin darnos cuenta que les estamos
causando más daño.
Lo ideal es cuidar los labios desde fuera con productos adecuados y desde dentro con una
buenas higienes alimentarias, como es una correcta hidratación (recordemos que
debemos beber en torno a dos litros de agua al día).
1. Hidratar
Consiste en aplicar un bálsamo protector o
cremas muy untuosas que contengan cera o manteca de cacao, de manera frecuente.
Las barras de labios hidratantes y que
además incorporan factor de protección solar son excelentes opciones.
Mantener nuestros labios hidratados es un
buen truco de belleza ya que la mejor forma de aumentar el volumen de nuestros
labios es tenerlos siempre hidratados.
Nuestra boca no contiene melanina, que es
el pigmento que le confiere el color a nuestra piel y nos confiere una
protección frente a las quemaduras solares, por lo que se quema con facilidad.
Es muy importante protegerlos tanto si nos
encontramos en la playa como en la montaña.
Para ello es recomendable utilizar barras
de labios que incorporan factor de protección solar.
Recuerda que si eres propenso
a padecer Herpes Labial es para ti una práctica imprescindible.
3. Exfoliar
Recomendado en casos en los que deseamos eliminar los pellejitos
que aparecen cuando los labios han sufrido fuertes agresiones externas.
Debemos recordar que no debemos mordisquear
porque produciremos heridas.
Para ello podemos frotarnos los labios con
una toalla mojada con agua tibia o bien con un cepillo de dientes viejo o de
dureza muy suave.
Después debemos aplicar un bálsamo con efecto
regenerador que nos ayudará a eliminar las células muertas y aliviar la
sensación de tirantez.
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